Encuentro Parroquial 2018

Nuestro Encuentro Parroquial del nuevo curso 2018-2019 lo comenzamos hacia las 10:30, con una concurrida participación, ya no sólo de adultos, sino también de jóvenes y peques, pertenecientes a las distintas pastorales de nuestra parroquia.

La agenda de la mañana la inició nuestro párroco Fernando Artigas, presentando el contenido de nuestra asamblea parroquial a partir del lema para este curso “Escucha, Ora, Transforma”, y de los tres objetivos de la Planeación Estratégica, como orientación de nuestra misión como parroquia para los próximos tres años:

– Hacer énfasis en Jesús Sacerdote, contemplativo y solidario, en los procesos evangelizadores, para promover una profunda experiencia de fe.

– Participar en diferentes instancias eclesiales y sociales para crear comunión.

– Provocar una conciencia social que nos impulse a realizar acciones transformadoras en lo ecológico, político, económico, cultural y religioso.

Y como consecuencia de estos objetivos, para este curso, se nos proponen cuatro acciones muy concretas a las que Fernando nos invita a participar como comunidad parroquial:

  1. Con motivo de la beatificación de Conchita, se ha creado un grupo de reflexión para profundizar y actualizar su mensaje.
  2. Invitar a otras parroquias de nuestro Arciprestazgo a una OTE.
  3. Promover un equipo que nos convoque y promueva nuestra participación en la manifestación del Día de la Mujer.
  4. Convocar una charla sobre la Doctrina Social de la Iglesia, y un taller sobre ecología y reciclaje, como concienciación en nuestras comunidades. El equipo de ECO se dedicará durante el curso a movilizar y promover la concienciación ecológica en nuestra parroquia.

Una vez acabada la intervención de Fernando, Víctor Mojarrieta, de la comunidad de Epheta, nos animó a hacer oración a través de la lectura de un bonito cuento, “Lucía y el silencio”.

Seguidamente, aún reflexionando sobre el texto que nos había leído Víctor, y quizás algo dormidos algunos, apareció como un torbellino nuestro amigo Migueli, zamarreándonos, animándonos a orar, a reír, a cantar y a bailar con él, al son de sus chistes, chascarrillos y canciones con estribillos sugerentes…“como arenas del desierto vienen, como arenas del desierto van…”; “el corazón del mundo… ioe ie ie ie ie ie…”; “extranjero, qué será eso de extranjero…”; “el amor lo arregla todo, la gasolina siempre es amar…”; “cuida la tierra preciosa, cuídala…”; “tiro de la vida nueva, ah ah ah…”; “y ya no puedo vivir sin ti, hey hey,…”; “yendo contigo nada me inquieta, cada mañana es nueva,…”; “y dije, hágase, en Dios confío, todo irá muy bien…”

Vamos, que Migueli nos “puso las pilas” a grandes y pequeños, y nos lo pasamos fenomenal  con él.

Después de un breve descanso, y mientras los peques se divertían y quedaban asombrados con los trucos de magia del mago Raúl Cancela, pasadas las 12,30 horas, Luis Arancibia nos hizo disfrutar de una magnífica charla cuyo título era “Migrantes y Refugiados, entre la hostilidad y la hospitalidad”.

Comenzó invitándonos a afinar nuestra mirada, a saber interpretar e interiorizar, a conectar nuestro interior con la realidad que nos rodea, porque necesitamos transformarla, actuando en esas “grietas” de la realidad. Y a partir de ahí, enlazando con nuestro lema parroquial, Luis nos fue llevando a reflexionar sobre Migrantes y Refugiados. Aquí dejamos algunas notas para que nos sirvan como recordatorio y a su vez de reflexión en todo ello.

1.- Desde la ESCUCHA (Contempla).

Las migraciones son una realidad histórica y global, la movilidad de los pueblos ha sido una constante en la historia de la humanidad. Todos somos hijos de migrantes.

Se nos dice que Europa es asediada por las migraciones, pero África y Asia son las geografías del planeta donde más movimientos migratorios se producen. Se estima que 1 de cada 10 personas vive en un lugar diferente de donde nació, y 1 de cada 30 abandonaron su país trasladándose a otra nación.

El migrante forzoso (el refugiado pertenece a este colectivo) es aquel individuo que se ve obligado a huir de su hábitat, como consecuencia de la violencia de mafias o por guerras, por la desigualdad y la pobreza, por persecuciones, por razones de género, religiosas o políticas. También los migrantes se desplazan por el crecimiento demográfico y por razones medioambientales (sequías, desertificación…). Los migrantes-refugiados, unos 25 millones de personas en todo el mundo, no suelen ser los más pobres, sino todo lo contrario, tienen conocimientos y capacidad para dar el salto y cambiar su vida en otro país.

El camino del migrante es muy duro y penoso, siempre a merced de las mafias, expuesto a ser agredido por su vulnerabilidad, y llegando a ser víctima de trata (8 de cada 10 han sufrido agresiones).

Las fronteras del 1er mundo están llenas de vallas y de impedimentos para el paso de migrantes a sus territorios. Estamos viviendo en estos días noticias escalofriantes con la caravana migrante de centroamericanos hacia la frontera de EEUU pasando por México. Otro caso sangrante es el de la Unión Europea, que acordó con Turquía, previo pago de importantes cantidades de dinero, que sea la frontera que frene la entrada de millones de sirios y afganos que huyen de la guerra hacia los países europeos. Un caso distinto es el de Líbano, que es considerado el país más acogedor y hospitalario del mundo, porque 1 de cada 6 de sus habitantes son refugiados.

España es la frontera sur de Europa, y nuestra actuación no es muy distinta a los países del 1er mundo. Marruecos recibe dinero periódicamente de la Unión Europea, a instancias españolas, para controlar los flujos migratorios procedentes del África subsahariana. La llegada de migrantes a España se ha multiplicado, pasando de las 500.000 personas allá en el año 2000, a los 5 millones en 2015. Sin embargo, no somos el peor destino para los migrantes, ni mucho menos. El proceso de integración de estas personas ha funcionado mejor que en otros países, porque se facilita al migrante el acceso a una sanidad y una educación gratuitas, y pueden conseguir la residencia en España, por arraigo, en 3 años. Pero hay que reconocer que los CIE (Centros de internamiento de extranjeros) no funcionan bien y los organismos para la tramitación de solicitudes de asilo están colapsados, por problemas administrativos internos principalmente, con más de 35.000 de potenciales refugiados esperando a que se resuelva su expediente y reciban la tarjeta roja que les permita regularizar su situación y poder establecerse en nuestro país.

2.- Desde el ORA (Profundiza).

Luis nos invitó a profundizar mediante dos reflexiones.

Primero, una reflexión teológica a través de 3 imágenes:

  • Un cuadro de Fray Angélico (la huida a Egipto). Jesús huyó y fue refugiado. Debemos estar próximos a los migrantes. Dios es movimiento, se desplaza allá donde está el sufrimiento, y desde ahí nos atrae, va por delante de nosotros.
  • Un icono sobre la Trinidad. Es la hospitalidad y la acogida del débil. Como cristianos nos toca porque, de alguna manera, todos hemos sido acogidos al venir a este mundo. Es la oportunidad del encuentro con Dios.
  • Un mosaico de Pentecostés. Todos somos hijos de migrantes, es lo que nos hace iguales, descendientes de aquél que acoge.

Segundo, una reflexión política a través de 3 preguntas:

  • ¿Podrán tener los migrantes un lugar para vivir?
  • ¿Podemos vivir todos juntos?
  • ¿Habrá quienes sostengan la solidaridad y la fe?

3.- Desde el TRANSFORMA.

– Acompañar: ser cercano y afectivo con el otro.

– Servir: generar comunidades de hospitalidad para demostrar que la acogida es factible.

– Defender: hay que estar presentes en el debate político y participar.

Finalmente, y después de mostrarnos algunos videos con testimonios reales, Luis Arancibia nos invitó a participar a través de la web visibles.org, sobre la problemática de las empleadas del hogar que son migrantes.

Acabamos el Encuentro Parroquial compartiendo todos lo que habíamos traído de picoteo.

En fin, esperamos que con la lectura de este artículo, hayamos trasladado lo vivido intensamente en este Encuentro Parroquial, y que sirva para animaros a aquellos que no vinisteis a que penséis que el próximo año sobre estas fechas, habrá otro Encuentro Parroquial al cual desde ya os invitamos a participar y disfrutar.

Javier Hernán – ECo